Permutas

La permuta es otra manera, eso sí, excepcional, de poder modificar el puesto de destino de cualquier funcionario/a docente a través del cambio del puesto con otro/a compañero/a y siempre que se cumplan una serie de requisitos.

Podrán autorizarse excepcionalmente permutas entre personal funcionario en activo de los cuerpos docentes cuando concurran las siguientes condiciones:

  1. Que desempeñen con carácter definitivo los destinos que se permutan. 
  2. Que acrediten, al menos, dos años de servicios efectivos con carácter definitivo en las plazas objeto de la permuta. 
  3. Que ambos destinos sean de igual naturaleza y correspondan a idéntica forma de provisión.
  4. Que quienes pretendan la permuta, cuenten respectivamente con un número de años de servicio que no difiera entre sí en más de cinco.

Que se emita informe previo favorable por la unidad administrativa de la que dependa cada una de las plazas.

Cuando la permuta se pretenda entre plazas dependientes de Administraciones educativas diferentes, será necesario que ambas lo autoricen simultáneamente. 

En el plazo de diez años, a partir de la concesión de una permuta, no podrá autorizarse otra a cualquiera de las personas beneficiarias de una permuta anterior. 

No podrá autorizarse permuta entre personal funcionario cuando a alguno/a de ellos/as le falten menos de diez años para cumplir la edad de jubilación legalmente establecida. 

Se dejarán sin efecto las permutas si en los dos años siguientes a la fecha en que tengan lugar, se produce una excedencia o jubilación voluntaria de alguna de las personas permutantes. 

A quien se haya autorizado la permuta no podrá participar en los concursos de provisión de puestos hasta que no acredite, al menos, dos años de servicios efectivos a partir de la fecha de la toma de posesión en la plaza a la que se incorporó como consecuencia de la concesión de la permuta.