Se trata de una medida que reconoce la labor de los más veteranos, se adecúa a los ritmos vitales y genera nuevos horarios para docentes más jóvenes.
Hasta el año 2012, el personal docente de Cantabria tenía, a través de un acuerdo firmado con la consejera Eva Díaz Tezanos (PSOE), derecho a una sustitución parcial en la jornada lectiva para mayores de 55 años, que completaba el horario de permanencia con asignaciones horarias de otro tipo (biblioteca, coordinaciones…). Este derecho suponía un reconocimiento a la labor desarrollada a lo largo del tiempo por nuestros nuestros compañeros y compañeras más mayores, una adecuación laboral a los ritmos vitales y, a su vez, generaba nuevos horarios para docentes más jóvenes de las listas de interinos.
Con la excusa de la crisis económica, los gobiernos de Mariano Rajoy e Ignacio Diego llevaron a cabo una política de recortes en los servicios públicos, con la Consejería de Educación de Miguel Ángel Serna (PP) actuando con la mayor devoción por este austericidio que nos llevó a perder, por ejemplo, este derecho que muchos compañeros disfrutaban.
El STEC, que entonces se volcó en la ‘marea verde’ que hizo frente a estas políticas, ha venido luchando para revertir todos y cada uno de los derechos perdidos en aquel periodo. Así, al comienzo de la presente legislatura, con la Consejería de Educación en manos regionalistas por primera vez en la historia, planteamos a Marina Lombó una serie de demandas de calado, entre las que se encontraba recuperar este derecho a la reducción de la jornada lectiva para mayores de 55 años. Entonces, como ha sido norma con muchas otras cuestiones, la Consejería de Cantabria se mostró receptiva, pero había una «fuerza mayor» que se lo impedía. En este caso no era «la coordinación en Madrid» ni «las limitaciones presupuestarias», sino la Ley de Cantabria 2/2012, de 30 de mayo, de Medidas Administrativas Económicas y Financieras para la Ejecución del Plan de Sostenibilidad de los Servicios Públicos de la Comunidad Autónoma de Cantabria, que en su capítulo IV suprimía “la sustitución parcial de la jornada lectiva a los docentes mayores de 55 años”.
Comenzamos entonces una gira de encuentros con los grupos parlamentarios del PRC, PP, PSOE y Cs, en la que les hemos venido planteando la necesidad de reformar ese capítulo legal. Sin embargo, una vez más, las buenas palabras no se plasmaban en el órgano legislativo de nuestra Comunidad.
En las asambleas informativas que desarrollamos por todos los centros educativos, esta cuestión es sin duda una de las que más presente tienen los trabajadores y más apoyos recibe. Por esa razón, además de por coincidir con nuestros principios ideológicos de cooperación y reparto del trabajo, fue un pilar de nuestro programa para las recientes elecciones sindicales, que ganamos por séptima vez consecutiva, pasando de 13 a 15 delegados en la Junta de Personal.
Esta semana, el responsable de Educación del Partido Popular en Cantabria nos ha comunicado la presentación, por fin, de una enmienda a la ley de acompañamiento de los presupuestos autonómicos, que derogaría el capítulo IV de la Ley 2/2012, tal y como les solicitamos hace tiempo.
De esta forma, el PP se haría una auto-enmienda una década después, permitiéndonos recuperar oportunamente el derecho perdido. Y como rectificar es de sabios, instamos al resto de partidos políticos a favorecerlo, apoyando dicha enmienda. Sería una buena noticia para el sistema educativo y el personal docente de Cantabria, retirar esta normativa austericida que satura al profesorado más veterano e impide generar nuevos puestos para las generaciones jóvenes. En el contexto actual de asfixiante carga burocrática en los centros, esta rebaja del horario lectivo podría ayudar además a repartir mejor ciertas tareas.